Productos desinfectantes - Tipos de desinfectantes
Al hablar sobre productos desinfectantes siempre recurrimos a los más conocidos, como los derivados del cloro o de la lejía, el alcohol o productos detergentes.
En este post, explicamos todo lo que tienes que saber sobre los productos desinfectantes y qué tipos puedes utilizar para la limpieza y desinfección de tu hogar.
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Productos desinfectantes... ¿Qué son?
- Viricida: los desinfectantes viricidas están especialmente diseñados para eliminar virus.
- Bactericida: inactivan de forma eficaz bacterias y microorganismos similares.
- Fungicida: los desinfectantes de esta clase se encargan de combatir y erradicar hongos parásitos que son perjudiciales para la salud.
Aunque estos son los tipos de desinfectantes más comunes existen otros para usos más específicos, desinfectantes eficaces ante esporas, legionella, parásitos, alguicidas o levaduras. ¿Cómo puedes diferenciar unos de otros o identificar de qué clase es un producto desinfectante en concreto? Muy sencillo: basta con que consultes el número de registro.
Los desinfectantes viricidas se clasifican con un 90 en el número de registro, los bactericidas con el 20 y los fungicidas con el 40.
¡Importante! No siempre hace falta que compres un desinfectante para cada uso, existen productos como las pastillas Virucida Cleanpill son de amplio alcance: son bactericidas, viricidas y fungicidas.
Tipos de desinfectantes
- Pastillas desinfectantes: son muy cómodas de usar y fáciles de almacenar. La ventaja de este producto desinfectante es que duran en el envase varios años en perfectas condiciones y además son multiusos generalmente. Es decir, como tienen aplicaciones muy variadas, con solo este producto puedes aunar la mayoría de tareas de la limpieza del hogar. Por ejemplo, nuestras pastillas desinfectantes Virucida CleanPill se pueden utilizar para desinfectar todo tipo de superficies, pequeños objetos, suelos, se pueden meter en la lavadora para lavar ropa blanca, en el lavavajillas...
- Lejía, derivados del cloro, amoníaco y similares: son los más comunes para limpiar el hogar. Su uso es muy frecuente porque son relativamente fáciles de aplicar, aunque su almacenaje es más complejo que el de las pastillas. Son eficaces, aunque pasados 3 meses suelen perder efectividad si el componente base se evapora, especialmente la lejía.
- Detergentes y otros desinfectantes líquidos: son los aliados por excelencia de la lejía y productos similares. En este apartado están todos los productos de limpieza del hogar con aplicaciones específicas y que además desinfectan. Por ejemplo, determinados limpiacristales, detergentes, productos específicos para suelos de parquet con acción desinfectante, etc.